Las lagrimas del cielo no pueden arrastrar lo no dicho, como un monumento pétreo, allí tu imagen de mudez y atracción emerge.
No murmura palabra pero ella esta como una sombra que no puede ser desmantelada ni por una implosión intencionada, ni arrasada por un aluvión. El querer olvidarla o sepultarla provoca una consecuencia adversa, ella me acompaña como una tormenta tropical que con su constancia va inundando las capas mas profundas de mi.
Ella en su mutismo siembra lo que provoca: fascinación y deleite; yo huyo porque lo vedado produce conmoción silente, ella es adicción, frenesí y atracción.
En un día gris, el cielo lloro hasta deshidratarse. La noche intento ahogarme en mis miedos y soledades, pero el anhelo que un sol amarillo me bese mi piel zanjada de agua. me impulso a confiar...
La poesia es un tesoro poliedrico que viaja dentro mio, en otras ocasiones es un soplo en el alma y desnuda mis miedos. Al abrir los ojos soy testigo que desde su insolencia su misión esta acabada. Vivimos todos en la interperie con el corazón desnudo invadido de audacia y de temor.
miércoles, 13 de julio de 2016
domingo, 5 de junio de 2016
Emborrachándome de mi
"La sinceridad nos tortura, la confesión aflora.
Todo lo que hemos bebido anoche anterior lo deletreamos,
Todo lo que hemos bebido anoche anterior lo deletreamos,
las burbujas de alcohol es ínfimo perfume de la borrachera.
En la inconsciencia nos hemos bebidos
nuestros miedos,
los silencios,
la soledad,
la tristeza y
hasta algunas gotas de amor que andábamos buscando con desesperación para evitar la deshidratación de nuestro corazón agrietado.
Lo que se ha bebido ya se ha evaporado,
solo se que me he emborrachado de mi hasta el hartazgo.
Los pececillos de hielo ya se han marchado..."
Lo que se ha bebido ya se ha evaporado,
solo se que me he emborrachado de mi hasta el hartazgo.
Los pececillos de hielo ya se han marchado..."
jueves, 2 de junio de 2016
Tatuaje
Ensordecedor silencio
has garabateado mi piel de tus palabras,
no te entiendo.
Necesitare
de otros ojos,
de otros labios,
para develar
lo escrito...
La ansiedad
de la tinta me carcome.
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